En ese mano a mano particular los iruneses se mostraron superiores a la Real durante las siguientes tres temporadas, cerrando el paso a los donostiarras al campeonato nacional. Durante los siguientes años el Campeonato Guipuzcoano fue un mano a mano directo entre Real Sociedad y Real Unión, siendo el tercer equipo en liza del campeonato el Club Deportivo Esperanza de San Sebastián, aunque el nivel de estos se encontraba lejos del de los dos primeros.